... a la casa

Llegando a la casa nos dejamos llevar por lo bonito que es cork y la verdad la gente muy amable.

Llegamos a la casa, de color rosa por cierto, la casa muy grande y iluminada, cada habitación es espaciosa, sin figuras, cuadros o objetos inútiles que limpiar, tiene 3 plantas. Ya sabíamos que la casa tiene 7 habitaciones (todas no estarían ocupadas), tiene 3 cuartos de baño, 2 neveras, lavadora, secadora, lavavajillas... y una gran cantidad de arañas o telarañas. Conocimos a una de las inquilinas (una muchacha de unos 20 años de edad aspirando el salón), nos saludamos (ella habla inglés) y llegamos a entender que en la casa no hay normas, ninguna, tu manchas tu limpias (eso es lo único). La cosa es que a mi si me dan susto y asco y de todo lo malo por el cuerpo, tampoco las mato (del mismo asco y susto que me dan), pero no puedo tenerlas en el mismo lugar que yo este...

Nuestra habitación tiene la cama que es de matrimonio, (colchón bueno y cómodo) las almohadas blandas, pero soportables, la funda y colchas abrigables pero a la vez finas y no dan calor, tenemos un radiador (desde que llegamos lleva puesto a temperatura media), una chimenea (no creo que la usemos), una ventana grande con cortina (como ya he dicho me sorprende la cantidad de iluminación que hay), un armario bastante grande con pocas perchas, mesita de noche, otro armario con estanterías y un escritorio grande y dos sillas de madera con respaldo, ah! y dos percheros en la pared repartidos en la habitación. No hemos tardado en llenar la habitación con nuestras cosas.